Leadville 100 2009

El año pasado supe de esta prueba porque Lance Armstrong la corrió en parte como su retorno a la competición. Pero en realidad se trata de una prueba con una gran tradción en la cuna del MTB, en Colorado, USA, dominada durante varios años por un gran mountainbiker de la "linea fundadora" Dave Wiens...hasta la aparición de Lance. Porque este año el de Texas no sólo la ganó, sino que estableció un nuevo record bajando muchísimo los tiempos de las ediciones anteriores. Pero mejor, acá está la crónica desde un medio especializado, esmtb.com:

Ya ha pasado. Ya se ha celebrado la Leadville 100 de esta temporada. Quizás la edición más esperada de su historia. Y Lance Armstrong no ha fallado a las expectativas creadas entorno a su segundo participación en esta carrera. El heptacampeón del Tour no sólo ha ganado la carrera, si no que lo ha hecho con un punto de épica, recorriendo los últimos quilómetros pinchado y entrando en meta así. De esta forma, y al igual que hizo Wiens el año pasado, el ganador de la Leadville entraba con una de sus ruedas pinchadas. Por si fuera poco no se ha conformado con llevarse la victoria, y en todo momento ha competido con el record de la prueba en mente. Lance ha pulverizado el anterior tiempo impuesto el año pasado por Dave Wiens, estableciéndolo en 6:28:50, rebajando de forma impresionante el tiempo de 6:45:45 de la anterior edición.


Para conseguirlo ha tenido que sobrevivir al intenso ritmo de salida que se ha impuesto. Ante las expectativas creadas para esta carrera, la salida, lejos de ser relajada para afrontar las 100 millas de recorrido (160km), ha sido más similar a la de una prueba de cross country. Matt Shiver ha sido el encargado de torturar a todos los participantes desde los primeros instantes. "Todos íbamos sufriendo con el ritmo de Matt, excepto Lance" explicaba Travis Brown, otro mítico en la parrilla de la carrera que competía, una vez más, con una extravagante bicicleta preparada según su estilo.

Pero para ganar y batir el tiempo record, Lance debía atacar desde lejos. Y así fue. Armstrong recorría más de 60 millas en solitario. "Es algo que creo que nunca he hecho. En ningún Tour de Francia he ido 60 millas sólo. Como mucho 20, sin contar las contrarrelojes, pero esto de hoy ha sido una crono de más de 60 millas. Muy muy duro" explicaba Lance.

La dureza inicial no ha llegado sólo por el ritmo. La meteorología no ha estado de lado de los bikers, y un intenso frío, junto con lluvia ha hecho que todos los participantes tuviesen que padecer más de lo esperado en los primeros compases de la carrera.

El otro gran nombre del día, el de Dave Wiens, dominador de la prueba hasta la fecha en los últimos años, no era un hombre triste a su llegada. "Él es Lance Armstrong. Y acaba de llegar del Tour de Francia. El año pasado acababa de llegar de empezar sus entrenamientos, lo que hizo que su pique conmigo fuese mucho más equilibrado. Este año he rodado de forma fantástica, así que estoy contento" explicaba Dave, que acabaría 2º, aunque a casi 30 minutos del ganador del día. Eso sí, con un crono por debajo de las 7 horas, 6:57:01.

Hubo gente que tuvo peor suerte, como el caso de Tinker Juarez, a quien una rotura del cierre de la tija de sillín le impedía demostrar todo lo que se había preparado para la cita.


Lance comentaba sobre su pinchazo "cuando pinchas en carretera viene el coche y te cambia la rueda. Así que normalmente no reparo pinchazos. Cuando he visto que había pinchado he pensado en lo malo que soy reparándolos y lo mucho que tardo, así que he creído que iría mejor poner algo de aire y espuma para ver si tapaba el pinchazo. Y lo ha hecho durante un rato. Hasta que ha vuelto a perder el aire. Entonces es cuando he visto que tenía que llegar así hasta meta." Por fortuna ya se encontraba en el descenso final hacia la llegada.